FARAO RAMSES I

¿A qué huele?

El ron oscuro se derrama sobre especias molidas en mortero de bronce, su calor chocando con el filo del pachulí. El ámbar no brilla, sino que arde lento como carbón bajo capas de tabaco envejecido y vainilla negra.

Huele a trono tallado en maderas prohibidas: poder que no pide permiso, dulzura que no concede perdón.

No es fragancia. Es un decreto real escrito sobre tu piel.

Poder, Fuego, Legado.