VIBRANT ORANGE & NEROLI

¿A qué huele?

La mandarina estalla como un grito de verano, su jugo corriendo por la piel mientras el neroli abre sus pétalos al mediodía. El algodón de azúcar no llega como dulzura infantil, sino como el polvo dorado que queda en los dedos después de robar fruta en un huerto ajeno.

Huele a camisa blanca abandonada en una hamaca: sol, sal y ese rastro de azúcar que nunca se lava del todo.

Luz, Juventud, Libertad.